Bruselas (EuroEFE).- España fue el país en el que más cayeron los cigarrillos falsificados o de contrabando en 2023 entre los diez mercados europeos en los que hay más presencia de estos productos ilícitos, según un estudio anual impulsado por la tabacalera Philip Morris y presentado este jueves en Bruselas.
El documento refleja que en 2023 se consumieron más de 35.000 millones de cigarrillos ilícitos en los 27 estados miembro de la Unión Europea (UE), creciendo por quinto año consecutivo.
«Estamos siendo testigos de una evolución de los grupos del crimen organizado en Europa, ya que cada vez más se están ubicando en instalaciones de producción más cercanas a países de Europa occidental, dijo en una rueda de prensa en Bruselas Christos Harpantidis, vicepresidente senior de Asuntos Exteriores de Philip Morris International (PMI).
Counterfeit cigarettes remain one of the main sources of illicit consumption in the European Union.
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— Philip Morris International (@InsidePMI) September 12, 2024
«Consideramos que este fenómeno es una consecuencia directa de enfoques políticos fallidos que no han hecho lo suficiente para frenar el comercio ilícito y reducir la permanencia del tabaco, y está poniendo en riesgo a consumidores, gobiernos, empresas legítimas y sociedad», añadió el vicepresidente de la tabacalera.
De acuerdo al informe, elaborado con datos de 38 países europeos, la decena con mayor volumen de cigarrillos falsificados o de contrabando fueron Francia, Ucrania, Reino Unido, Grecia, Alemania, Polonia, Rumanía, España, Bélgica e Italia.
En el caso de España, fue el país en ese grupo que más redujo el volumen en 2023 frente al año precedente, en 400 millones hasta situarse en los 1.200 millones.
En términos globales, según el estudio, el consumo de cigarrillos en España cayó hasta los 40.700 millones en 2023, lo que supuso 2.470 millones menos que el año anterior.
El porcentaje de falsificaciones y productos de contrabando en el consumo total de cigarrillos disminuyó 0,9 puntos porcentuales, hasta el 2,8 %, en 2023, alcanzando el nivel más bajo observado desde 2019.
Este descenso se debió a la reducción de las entradas de ‘cigarrillos blancos ilícitos’ (los que suelen fabricarse legalmente en un país pero que han sido pasados de contrabando a través de las fronteras y se venden sin pagar impuestos), compensada en parte por el aumento de la falsificación de cigarrillos, según el informe.
Harpantidis destacó la disminución en el consumo ilícito en países como Italia, Polonia, Rumania y España. «Necesitamos continuar trabajando junto con las fuerzas de seguridad y los gobiernos para garantizar que el comercio ilícito no se convierta en un problema aún mayor en toda la UE», señaló.
En 2023, las falsificaciones representaron unas pérdidas de ingresos fiscales por valor de 210 millones de euros, 75 millones menos que en 2022.
El aumento del consumo ilícito de cigarrillos en Europa en 2023 se vio impulsado principalmente por un incremento de los falsificados y de contrabando en Ucrania, el Reino Unido y Grecia.
Francia continuó como el mayor mercado de cigarrillos ilícitos de los 38 países examinados, con unos volúmenes totales que se mantuvieron estables frente a 2022, en los 16.800 millones.
Esa cifra llegó a los 8.400 millones en Ucrania (con un ascenso de 1.100 millones frente a 2022), a 6.700 millones en Reino Unido (con un incremento de 800 millones) y a 3.500 millones en Grecia (600 millones más que el año anterior).
El consumo total de cigarrillos en los 38 mercados europeos analizados mantuvo su tendencia descendente, de un 4,5 % según el estudio.
No obstante, el contrabando y la falsificación crecieron y prosiguieron su tendencia al alza de los últimos años.
«Si queremos combatir el comercio ilícito, los gobiernos deben implementar medidas implacables para hacer cumplir la ley contra los delincuentes que se benefician del mercado negro. Esto ha demostrado ser exitoso frente a los impuestos excesivos sobre los bienes de consumo, o incluso la prohibición», destacó el vicepresidente de PMI.
Así, el consumo ilícito en los 38 mercados creció un 3 % en 2023, hasta los 52.200 millones de cigarrillos, una tasa superior al 0,3 % registrado en 2022.
Según el informe, si estos cigarrillos se hubieran adquirido legalmente en los mercados en los que se consumieron, se habrían recaudado unos 16.600 millones de euros adicionales en impuestos.
Editado por Sandra Municio