Bruselas (EuroEFE).- La Comisión Europea (CE) propuso este miércoles suspender los visados a miembros del Gobierno y otros cargos oficiales de Bielorrusia, en respuesta al régimen del presidente de ese país, Alexandr Lukashenko, que desde hace meses ha facilitado la entrada en la Unión Europea de miles de migrantes irregulares a través de las fronteras con Lituania, Polonia y Letonia.
Se trata de una suspensión «parcial» del acuerdo entre la Unión Europea y Bielorrusia para la Facilitación de Visados, que entró en vigor el 1 de julio de 2020, y que afectará solamente a los funcionarios del régimen bielorruso y no al resto de ciudadanos de ese país, precisó la Comisión.
Bruselas considera que la crisis en las fronteras entre Bielorrusia y la UE, así como otros actos en los que ha incurrido el régimen de Lukashenko, suponen «una ruptura de los principios fundamentales» en los que se basa el acuerdo para la Facilitación de Visados.
Otros motivos que han llevado a Bruselas a proponer la medida anunciada hoy son las elecciones presidenciales en Bielorrusia celebradas en agosto de 2020, que «no fueron ni libres ni justas», y que han privado al régimen de legitimidad democrática, según la Comisión.
La UE ya impuso en ese contexto sanciones a ese país, en particular la prohibición de viaje y la congelación de activos de 40 personas responsables del fraude en esos comicios y de la violencia contra las manifestaciones pacíficas que tuvieron lugar en protesta por esos hechos.
En respuesta, Bielorrusia anunció la suspensión de su participación tanto en el partenariado oriental como en el acuerdo de readmisión suscrito con la UE.
En la práctica, la suspensión de visados propuesta por Bruselas, que aún deberá recibir la luz verde del Consejo (países de la UE), afectará a los miembros de las delegaciones oficiales de Bielorrusia, de los gobiernos nacional y regionales, así como de los parlamentos, del Tribunal Constitucional y de la Corte Suprema.
Lituania aloja ya a más de 4.100 inmigrantes, la mayoría de Irak, que llegaron al país desde el comienzo del verano; algunas autoridades han calificado la situación de «guerra híbrida» por considerar que el régimen bielorruso utiliza a inmigrantes irregulares para responder a las sanciones de la UE contra Bielorrusia.
Editado por F.Heller