Bruselas (EuroEFE).- La Comisión Europea y organizaciones de consumidores pidieron a 20 aerolíneas que acaben con «prácticas engañosas» que pueden suponer un «blanqueo ecológico», como afirmar que pueden compensar las emisiones contaminantes de su vuelo con el pago de tasas adicionales, bajo pena de ser sancionadas.
Las aerolíneas incluyen, entre otras, a las españolas Vueling y Volotea, así como a Air Baltic, Air Dolomiti, Air France, Austrian, Brussels Airlines, Eurowings, Finnair, KLM, Lufthansa, Norwegian, Ryanair, SAS, SWISS, TAP y Wizz Air, según la Organización de Consumidores Europea (BEUC).
Tras una alerta de esa organización, el Ejecutivo comunitario y la red que agrupa a las autoridades de consumo nacionales de la Unión Europea (UE) han enviado cartas a esas aerolíneas identificando una serie de prácticas «potencialmente engañosas» que podrían ser ilegales, y dándoles 30 días para que las corrijan.
✈️ Is your airline asking to pay a fee to offset CO2 emissions?
This could be a misleading greenwashing practice.
Together with national consumer authorities, we are taking action against 20 airlines for their misleading environmental marketing claims.
— European Commission (@EU_Commission) April 30, 2024
Entre las acciones identificadas, las organizaciones de consumidores destacan las afirmaciones que hacen estas aerolíneas de que las emisiones de CO2 generadas por un vuelo pueden ser compensadas a través de proyectos climáticos o con el uso de combustibles sostenibles, a los que los consumidores pueden contribuir pagando tasas adicionales.
Otra práctica problemática consiste en proporcionar al consumidor una «calculadora» de emisiones para un vuelo sin dar pruebas científicas de si el cálculo es fiable o sin informar de los elementos que se usan para hacerlo.
Afirmar que la aerolínea está avanzando hacia las emisiones cero sin mostrar un compromiso claro y verificable, o presentar una comparación de vuelos en función de sus emisiones sin informar de en qué se basa esta comparativa son otras de las medidas que generan inquietud.
«Las aerolíneas no han clarificado si estas afirmaciones se basan en pruebas científicas sólidas«, indicó en un comunicado la Comisión, que cree que estas prácticas pueden ser engañosas e infringir la directiva europea de prácticas comerciales injustas.
Negociación con Bruselas
Las compañías aéreas tienen ahora que responder en un plazo de 30 días proponiendo medidas para abordar estas preocupaciones, tras lo cual Bruselas y las organizaciones de consumo se reunirán con las empresas para debatir las soluciones y, una vez empiecen a implementarse, la Comisión monitorizará los cambios acordados.
Si las aerolíneas implicadas no adoptan las acciones necesarias, las autoridades de protección del consumidor pueden decidir tomar más medidas, incluyendo sanciones, recordó el Ejecutivo comunitario.
«Es inaceptable que las aerolíneas hayan inducido libremente a los consumidores a compensar las emisiones de sus vuelos, algunas veces a un alto precio. Uno nunca puede estar seguro de que los árboles plantados para compensar las altas emisiones de un vuelo vayan a capturar el carbono, si es que llegan a plantarse», dijo en un comunicado la directora general de BEUC, Monique Goyens, quien celebró que Bruselas haya decidido actuar.
Great news! Consumer protection authorities acknowledge airlines' #greenwashing practices we denounced last year. They call on companies to abide by the rules and stop misleading consumers. Our reaction:https://t.co/r5X7MXtAAG#GreenFlyingIsLying https://t.co/ZRK5QIxofO
— The Consumer Voice (@beuc) April 30, 2024
Editado por Lucía Leal