De jueves a domingo, del 6 al 9 de junio, unos 370 millones de votantes están llamados a las urnas en los 27 estados miembros de la Unión Europea para elegir a los próximos 720 miembros del Parlamento Europeo.
El resultado de estas elecciones también ayudará a determinar la composición de la próxima Comisión Europea, cuyo actual jefe, Ursula von der Leyen, espera un segundo mandato.
Las últimas encuestas y proyecciones muestran que la extrema derecha está lista para lograr ganancias significativas en el Parlamento Europeo, con partidos antes marginales que ahora están ganando influencia en la UE. Sin embargo, en general, se espera que el centro político de Europa se mantenga.
Con el inicio de las elecciones a solo un día, las campañas electorales en todo el bloque están en la recta final, pero en algunos países, la votación a nivel de la UE está siendo eclipsada por temas nacionales que captan la atención de los votantes.
La extrema derecha se prepara para ganar terreno
Se prevé ampliamente que las elecciones verán un aumento de los legisladores de extrema derecha, según las encuestas de opinión que predicen que las dos principales facciones de extrema derecha, los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) y el grupo Identidad y Democracia (ID), ganarán alrededor de una cuarta parte de los escaños en el próximo Parlamento.
Un rechazo a las políticas de cambio climático, el aumento de la migración, la incertidumbre económica y la ira anti-establishment son algunas de las muchas razones que los analistas mencionan para explicar el auge de la extrema derecha.
Ya a principios de año, el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR) predijo un «giro a la derecha» con partidos anti-UE ganando en nueve países de la UE, incluidos Bélgica, Italia y Francia. En los Países Bajos, el partido populista de extrema derecha de Geert Wilders, Partido por la Libertad (PVV), formó una coalición con otros tres partidos el mes pasado después de ganar las elecciones generales en noviembre.
«La realidad hoy es que hay espacio para construir una mayoría diferente en el Parlamento Europeo y para políticas diferentes», dijo la semana pasada la primera ministra italiana y líder del partido de derecha Hermanos de Italia (FdI), Giorgia Meloni.
A nivel de la UE, el FdI forma parte del grupo ECR, del cual Meloni también es presidenta. La semana pasada, dijo que tenía varias cosas en común con Marine Le Pen, la líder del partido de derecha francés Reagrupamiento Nacional (RN), que forma parte del grupo Identidad y Democracia (ID).
«Es claro que hay puntos en común», dijo Meloni en el Festival de Economía de Trento. «Hay puntos de contacto en la lucha contra la inmigración ilegal, en el enfoque hacia la transición verde y en la defensa de la identidad europea».
Un viaje accidentado en Francia
El partido de extrema derecha francés Reagrupamiento Nacional (RN) tiene una ventaja contundente para las próximas elecciones al Parlamento Europeo, según una encuesta de opinión publicada el domingo 2 de junio. La encuesta se realizó entre 1.803 personas entre el 29 y el 31 de mayo.
El candidato principal del RN, partido de extrema derecha, Jordan Bardella de 28 años, tiene el 32,5 por ciento de las intenciones de voto en la encuesta. Valérie Hayer, candidata principal del grupo Renovar Europa en el Parlamento Europeo y aliada del presidente centrista Emmanuel Macron, quedó en segundo lugar con el 16 por ciento, seguida por el candidato socialista de centro-izquierda Raphaël Glucksmann con el 13 por ciento.
En el ámbito nacional en Francia, la campaña electoral ha tenido algunos altibajos en los últimos días.
El lunes, el primer ministro de 35 años Gabriel Attal enfrentó acusaciones de buscar deliberadamente eclipsar a Hayer en las elecciones europeas cuando apareció inesperadamente en un escenario donde ella participaba en un debate de radio.
Attal ya había enfrentado acusaciones similares el mes pasado cuando, en lugar de Hayer, participó en un debate televisado con Jordan Bardella.
Cuestiones nacionales desvían la atención
En España, la última encuesta preelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) predijo una victoria del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), pero la mayoría de las otras encuestas predicen que el Partido Popular (PP) ganará las elecciones.
Sin embargo, los líderes de los principales partidos políticos se centran en los asuntos internos del país, como la Ley de Amnistía para la retirada de acciones legales contra varios separatistas catalanes y los casos de corrupción, lo que resulta en poca atención para las elecciones al Parlamento Europeo.
Mientras tanto, Portugal lucha con el temor a una baja participación. Es uno de los países de la UE que permite el voto anticipado, lo cual se reforzó este año en un intento de las autoridades portuguesas para alentar a la gente a votar. Muchos portugueses acudieron a las urnas varios días antes el pasado domingo, tras la peor tasa de abstención del país durante las elecciones de 2019, cuando alrededor del 69 por ciento de las personas elegibles no votaron. Esta fue la peor tasa desde que se unió a la UE en 1986.
Eslovenia celebrará tres referendos al mismo tiempo que las elecciones europeas, incluyendo uno sobre el final de la vida asistido voluntariamente y la legalización del cannabis.
Además, el proceso de reconocimiento del Estado palestino estaba en marcha justo antes de las elecciones. Como resultado, los temas europeos no han recibido tanta atención como de costumbre. El martes por la noche, el parlamento esloveno aprobó formalmente el reconocimiento, convirtiendo a Eslovenia en el último país europeo en hacerlo después de España, Irlanda y Noruega.
Los partidos del gobierno en Eslovenia esperaban que los referendos simultáneos aumentaran la participación en las elecciones europeas. Una encuesta encargada por el diario nacional Delo el pasado viernes mostró que el 39 por ciento acudiría a votar, diez puntos porcentuales más que en las últimas elecciones de la UE, y en general, una mayor participación que en cualquier elección de la UE en Eslovenia hasta ahora.
En Eslovaquia, el ataque al primer ministro pro-Rusia Robert Fico ha sacudido la campaña y podría aumentar el apoyo a su coalición populista.
En Polonia, donde el gobierno pro-UE de Donald Tusk llegó al poder a finales de 2023, la campaña siguió marcada por los agricultores enojados, apoyados por el partido opositor nacionalista de derecha Ley y Justicia (PiS).
La migración en la mente de los votantes
Los votantes de la UE, según encuestas, están sopesando temas que abarcan desde la guerra en Ucrania, las perspectivas económicas, el proteccionismo comercial, incluso con Estados Unidos y el riesgo de la inteligencia artificial (IA) para los empleos, la migración y también el cambio climático.
En Austria, por ejemplo, según una encuesta de la Sociedad Austriaca para la Política Europea que encuestó a 5.400 personas, una política uniforme de migración y asilo de la UE (56 por ciento) y reducir la brecha entre ricos y pobres (55 por ciento) están entre las prioridades más altas para los ciudadanos.
En la República Checa, los grupos populistas de extrema derecha como Libertad y Democracia Directa (Svoboda a přímá demokracie, o SPD) han logrado hacer del tema de la migración una cuestión importante en estas elecciones también. Afirma que el gobierno negoció un mal Pacto de Migración y Asilo para la República Checa y, por lo tanto, invitó a migrantes a Europa y a la República Checa.
ANO 2011, el partido del ex primer ministro Andrej Babiš, que forma parte del grupo Renovar Europa en el Parlamento Europeo, se ha convertido gradualmente en uno de los críticos más vocales de la UE. Se opone firmemente al Pacto Verde Europeo y al recientemente adoptado Pacto de Migración y Asilo. Según encuestas de mayo, ANO 2011 está listo para ganar las elecciones con el 23,1 por ciento de los votos.
Votación en el vecindario de la UE
Si bien los países europeos que no son miembros de la UE no pueden votar en las elecciones al Parlamento Europeo, en algunos países aún se llevan a cabo campañas.
Un ejemplo es Bosnia y Herzegovina (BiH). El 9 de junio, los ciudadanos croatas en BiH elegirán a doce eurodiputados de entre 300 candidatos y 25 listas. Las elecciones se celebrarán en siete lugares de todo el país.
BiH no tiene sus propios representantes en el Parlamento Europeo porque no es miembro de la UE, pero la política de los representantes croatas a menudo se centra en abogar por la ampliación de la UE y otros temas importantes para BiH, especialmente porque los croatas viven en el país como un pueblo constituyente.
Sin embargo, los ciudadanos eslovenos, polacos y rumanos no podrán votar en las elecciones al Parlamento Europeo en BiH, porque el gobierno no dio su consentimiento tras la oposición de los ministros de nacionalidad serbia. En Ljubljana, esta decisión fue descrita como inaceptable y el Ministerio de Relaciones Exteriores convocó al encargado de negocios interino bosnio en Eslovenia para expresar su protesta.
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