Bruselas (EuroEFE).- Avanzar en la protección de los espacios públicos e infraestructuras frente a posibles ataques terroristas y otras amenazas y reforzar la seguridad en el entorno digital son algunos de los objetivos del paquete de medidas presentados este miércoles por el Ejecutivo comunitario.
El vicepresidente de la Comisión Europea Margaritis Schinas y la comisaria de Interior, Ylva Johansson, hablaron en rueda de prensa de las principales propuestas de ese paquete, que ahondan en el trabajo iniciado en los últimos años.
By building tolerant societies, where everyone can find their place, we reduce the appeal of extremist narratives.
We presented a new agenda to step up the fight against terrorism and extremism & boost the EU’s resilience to threats.
More: https://t.co/mdTpzaJod5 #SecurityUnion pic.twitter.com/rKldTcTWPR
— European Commission 🇪🇺 (@EU_Commission) December 9, 2020
AGENDA ANTITERRORISTA
Bruselas presentó una agenda antiterrorista para ayudar a los países a anticipar, prevenir, proteger y responder a esa amenaza.
Entre otras ideas, plantea reforzar el mandato de la oficina de policía europea (Europol) en su labor contra el terrorismo y la delincuencia organizada.
Ello facilitará a esa agencia cooperar con las empresas (de internet) a cuyos servicios a menudo los terroristas recurren para reclutar seguidores, planificar ataques y difundir propaganda y obtener las pruebas pertinentes.
Europol podrá actuar también como centro de coordinación en caso de que no esté claro qué Estado miembro tiene jurisdicción en los delitos transfronterizos.
Asimismo, Bruselas propone también implicar a Europol en la detección de los yihadistas extranjeros que regresan a sus países de origen.
Aunque la agencia de Policía europea recibe información valiosa sobre sospechosos y delincuentes por parte de países terceros y de organizaciones internacionales, en estos momentos no puede incluir esos datos en el Sistema de Información Schengen.
Bruselas plantea cambiar las normas y permitir a Europol emitir alertas, en particular sobre los llamados “combatientes extranjeros”.
La agenda antiterrorista incluye también un apartado sobre cómo prevenir la radicalización y habla de la acción preventiva en las cárceles.
Propone la creación de un centro que reúna a responsables políticos, profesionales e investigadores para difundir conocimientos y experiencia sobre la prevención de la radicalización y prevé desarrollar una metodología para evaluar la efectividad de los programas de reintegración, con apoyo financiero del Fondo de Seguridad Interior.
Dado que una parte importante de las investigaciones en la UE contra la delincuencia y el terrorismo implican información encriptada, otro de los objetivos de Bruselas es mejorar el acceso a esos datos por parte de las autoridades competentes, respetando a la vez las normas sobre privacidad.
Bruselas tiene previsto trabajar con los Estados miembros para identificar posibles soluciones a nivel legal, operativo y técnico que faciliten un acceso legal a esa información y promover un enfoque que mantenga la efectividad del encriptado y a la vez proteja la privacidad y la seguridad de las comunicaciones.
En cuanto a la prueba elecrónica, necesaria en cerca del 85 % de las investigaciones penales, la CE invitó al Parlamento Europeo y al Consejo a la urgente adopción de las propuestas legislativas existentes.
Terrorism brings death, creates hatred and seeks to divide our societies. Today we give a robust response based on countering radicalization and protecting public spaces. More measures next week on protecting our critical infrastructure. No room for delays and gaps. #SecurityEU pic.twitter.com/5qJXZ86uV9
— Margaritis Schinas (@MargSchinas) December 9, 2020
SEGURIDAD
Por otra parte, la Comisión Europea advirtió de que es necesario reforzar la seguridad de las infraestructuras críticas, tanto de forma física como digital, frente a amenazas de desastres naturales o provocados por el hombre, por lo que presentará propuestas a tal efecto la próxima semana.
Este año, la Comisión tomó medidas estratégicas y técnicas para garantizar la seguridad cibernética de las redes 5G, así como para hacer frente a las amenazas transfronterizas para la salud.
Sin embargo, “sigue siendo necesario reforzar aún más la protección y la resistencia de las infraestructuras críticas tanto física como digital de una amplia gama de amenazas”, indicó Bruselas, que también instó a abordar las necesidades específicas de seguridad debido al mal uso de tecnologías emergentes como los drones.
Bruselas ha constatado que muchos de los ataques terroristas recientes en la UE se dirigieron a lugares densamente poblados o espacios altamente simbólicos.
Entre otras acciones, tiene previsto intensificar su apoyo a las autoridades locales y regionales para la protección de los espacios públicos y la prevención de la radicalización.
Ello incluirá la elaboración de un Protocolo de Seguridad y Resiliencia Urbana para las ciudades, que establecerá los principios y objetivos básicos en estas áreas.
Editado por Miriam Burgués